Las heridas de la infancia son un tema vital a tratar en todos los adultos, esto no quiere decir traumas infantiles o procesos traumáticos extremos. Las heridas de la infancia son heridas que todos tenemos activas en mayor o menor medida y en distintas combinaciones.

Los místicos dicen que son los retos que nuestra alma se ha propuesto a superar en esta encarnación. Los médicos dicen que fueron descargas emocionales que lastimaron nuestro cerebro justo en su proceso de formación y madurez.Yo digo que son ambas cosas igual de ciertas e igual de importantes.

Hoy les platico un poco sobre la herida de abandono.

La herida de abandono se manifiesta en la vida adulta impidiéndonos soltar las relaciones que ya no tienen sentido, baja autoestima y otras sombras bastante obscuras. Las personas que tenemos latente esta herida de la infancia tenemos que trabajarla para mantenerla bajo supervisión adulta y que no nos ponga el pie haciéndonos creer que necesitamos de esa relación o simplemente sentir un miedo profundo e irracional a que nos abandonen.

Recuerda que el primer paso para la sanación es hacer conciencia de la herida y créeme, ese es un graaaaaan paso.

Que tu día sea bendecido y lleno de alegría.